Las autoridades destruyeron un laboratorio de cocaína en el departamento de Nariño, un laboratorio clandestino en la vereda La Capilla, municipio de Providencia.
Este complejo ilegal producía alrededor de 2.000 kilogramos de cocaína al mes. Se estima que la afectación financiera para la organización criminal asciende a 700 millones de pesos.
El hallazgo se suma a otras acciones recientes que buscan frenar la producción y distribución de cocaína en la región. Nariño sigue siendo una de las principales zonas de tráfico de drogas en Colombia.
Golpe a la producción de cocaína en Nariño
Las operaciones contra el narcotráfico han aumentado en los últimos meses. La geografía de Nariño facilita la instalación de laboratorios de cocaína en zonas rurales de difícil acceso.
En mayo de 2023, la Armada Nacional destruyó diez laboratorios en Tumaco, Mosquera, Olaya Herrera y Santa Bárbara de Iscuandé. Estas estructuras pertenecían a disidencias de las FARC.
Estos laboratorios producían más de 3,5 toneladas de cocaína al mes. Su valor en el mercado negro superaba los 2.000 millones de pesos.
En febrero de 2024, un operativo del Ejército Nacional y la Fuerza Aeroespacial destruyó un megalaboratorio en Cumbal. En el lugar se encontraron más de 4.000 kilos de cocaína listos para ser comercializados.
Las autoridades estimaron que este laboratorio generaba ingresos mensuales de 22.833 millones de pesos. Se confirmó que estaba bajo el control del Frente Comuneros del Sur del ELN.
En abril de 2023, la Fiscalía General de la Nación desmanteló otro laboratorio en Santacruz de Guachavés. Se incautaron 3.820 kilos de cocaína junto con precursores químicos esenciales para su producción.
Impacto y desafíos en la lucha contra la cocaína
La destrucción de estos laboratorios representa un avance en la lucha contra el narcotráfico. La producción y exportación de cocaína, sigue siendo un problema para el país.
Las organizaciones criminales encuentran nuevas formas de operar y expandir sus actividades. El ELN y disidencias de las FARC dificulta el control del territorio.
Otro desafío es la crisis económica en muchas comunidades de Nariño. La falta de empleo empuja a algunos habitantes a involucrarse en la producción y distribución de cocaína.
La inseguridad y la falta de recursos han dificultado su avance.
Estrategias para combatir el narcotráfico en Nariño
Los operativos contra la producción de cocaína deben complementarse con estrategias de desarrollo social. Es clave fortalecer la presencia del Estado en las regiones más afectadas. Colombia sigue siendo uno de los principales productores de cocaína en el mundo.
La colaboración de Estados Unidos y la Unión Europea es clave para frenar el narcotráfico. Se necesitan estrategias conjuntas para atacar la demanda y la distribución global de la droga.
Conclusión
El desmantelamiento del laboratorio en Nariño es un golpe importante al narcotráfico. La producción y tráfico de cocaína siguen siendo una amenaza en el país.
Es necesario mantener los operativos de seguridad y reforzar el desarrollo económico en las zonas afectadas. Solo con una estrategia integral se podrá reducir el impacto del narcotráfico en Colombia.
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